CONTINUA LA POLEMICA “El equipo reaccionó como lo haría usted si ve que frente a sus ojos le roban algo que es suyo” La polémica eliminación de Artigas de Ecilda de la Copa Nacional de Clubes sigue dando que hablar. El jugador albirrojo Sebastián Berriel envió una carta a Primera Hora relatando su verdad sobre lo acontecido en Paysandú.
Tal como lo informaba Primera Hora en su edición del pasado miércoles, en filas del club ecildense existe un notorio malestar con la labor del árbitro de Florida Héctor Damián, que en el encuentro revancha frente a Bella Vista de Paysandú expulsó a seis jugadores albirrojos dejándolos en inferioridad numérica en una jornada –según la gente de Artigas- plagada de dificultades.
“Desde que llegué a Ecilda me han llegado muchos comentarios y ninguno coincidía con la realidad. Este escrito no lo hago para dar lástima ni para victimizarme, solo quiero que los hinchas de Artigas, allegados y gente de fútbol se enteren realmente de lo que sucedió”; comienza señalando en su misiva el futbolista.
Luego, bajo el subtítulo “Detalles”, Berriel narra lo acontecido desde el minuto 35 del primer tiempo, cuando comenzaron los hechos que desencadenaron en la suspensión del cotejo; y que tienen como protagonista al citado referí. Textualmente allí se indica: “Iban 35 minutos del primer tiempo y se produce una clarísima mano dentro del área de Bella Vista, lo que el “Sr. Arbitro” desestima y deja segur el juego.
En la misma jugada, un jugador de Artigas le reclama al “árbitro” que fue penal, el mismo, inmediatamente, de forma muy vehemente y prepotente le muestra la tarjeta amarilla.
El jugador indignado, ya que no solo no había cobrado el penal, sino que encima lo amonesta, le vuelve a reclamar, ahora ya por las dos injusticias, a lo que el “Sr. Arbitro” le saca tarjeta roja. En ese momento, se acerca otro compañero a increpar al “árbitro” por todo ese cúmulo de injusticias que había realizado en tan solo 3 o 4 minutos (sin faltarle el respeto), a lo que este señor, sin mediar palabra y nuevamente con gestos prepotentes, le muestra tarjeta roja a dicho jugador.
Ahí sí todo el equipo reaccionó como lo haría usted si ve que frente a sus ojos le roban algo que es suyo. Todo el plantel se abalanzó sobre el árbitro, sin golpearlo, pero sí dejando bien en claro que nos estábamos dando cuenta que lo que estaba haciendo era un hurto y que no se lo íbamos a aceptar.
Como si fuese poco y para que quedara bien en claro que Artigas no podía ganar de ninguna forma, el “árbitro”, deliberadamente, decide expulsar a 4 jugadores más y así dejar al equipo con 5, dando el encuentro por terminado, otorgando los puntos y la clasificación a Bella Vista”.
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