Ecuador atacará por las bandas
La habilidad de Édison Méndez y Antonio Valencia será fundamental para doblegar la defensa de Uruguay. Así lo creen tres técnicos del fútbol ecuatoriano.
La línea de volantes es la mayor fortaleza colectiva del equipo ecuatoriano.
En ese sentido, las microsociedades entre los mediocampistas serán determinantes para superar el juego defensivo que planteará Uruguay este sábado en el estadio Olímpico Atahualpa. En eso coinciden los estrategas Carlos Sevilla, Janio Pinto y Ricardo Armendáriz.
Los desdoblamientos y la velocidad de Édison Méndez y Antonio Valencia serán también parte del argumento ofensivo del equipo dirigido por Sixto Vizuete.
Esas fortalezas, a criterio de Sevilla, se fundamentan en el entendimiento futbolístico que ha alcanzado la zona de volantes y que significa que “jueguen de memoria y entiendan perfectamente lo que quiere el técnico”.
Según publicó ayer diario El País de Montevideo, el estratega Óscar Tabárez definirá minutos antes del partido si utilizará una línea de tres o cuatro defensores.
Eso dependerá del planteamiento táctico de Vizuete.
Pero, según las últimas prácticas charrúas, Tabárez planteará una línea de tres en su defensa con Andrés Scotti, Diego Lugano y Martín Cáceres. Esto con la intensión de que los laterales Álvaro y Maximiliano Pereira tapen las subidas de Néicer Reascos y Walter Ayoví Corozo, por las bandas derecha e izquierda, respectivamente.
El reto, tanto de Reascos como de Ayoví, será proyectarse constantemente al ataque. Eso mantendrá ocupados a los Pereira en labores defensivas, lo que repercutirá en que Diego Forlán y Luis Suárez no tengan el abastecimiento de balón suficiente.
El seleccionador ecuatoriano tiene claro el panorama. El recurso de Ecuador para vulnerar la zaga visitante será proponer el traslado de pelota por las bandas. Para lograr aquello Méndez y Valencia se convertirán en los ejes principales del trabajo ofensivo.
Desde su experiencia, Janio Pinto considera que Uruguay planteará “una defensa sólida con cinco jugadores cuando Ecuador tenga la pelota”. Para abrirse espacios y otorgar sorpresa a sus ataques, según Ricardo Armendáriz, el combinado nacional “deberá ejecutar constantes cambios de frente para desgastar a la zaga y a los volantes rivales”.
Para Sevilla, el juego se concentrará en el medio campo debido a que el anhelo por el triunfo de las dos selecciones abrirá muchos espacios en la cancha.
Para no caer en el ritmo que intentará imponer Uruguay, Pinto cree que el trabajo de marca deberá empezar desde los delanteros, es decir, que “la presión se debe ejercer, desde el inicio del partido, en campo rival”.
Armendáriz considera que ese será el trabajo primordial de los de los seleccionados nacionales y principalmente de los volantes de contención. Eso debido a que los celestes intentarán contragolpear valiéndose de la velocidad y la habilidad de los atacantes Diego Forlán y Luis Suárez.
“Hay que evitar que ellos queden mano a mano con nuestros defensas porque les resultará muy complicado detenerlos porque tenemos una zaga lenta”. Eso anticipó Sevilla, para quien los remates de media distancia de Walter Ayoví, Valencia y Méndez son opción para “abrir el marcador”.
Los 2 850 metros sobre el nivel del mar de Quito dejaron de ser el arma principal de la Selección para ganar sus partidos. Así lo cree el ex preparador físico de la tricolor Duffer Alman.
Para Alman, el fútbol de Ecuador tiene como virtud principal el juego en conjunto, basado en la velocidad en el área rival.
Considera razonable que el equipo de Vizuete mantenga la posesión de la pelota para de esa manera “mermar minuto a minuto el arresto físico, principalmente de los defensores rivales”.
Los tres técnicos coinciden además en que la mejor defensa de Ecuador será hacer rotar el balón y recuperarlo inmediatamente cuando lo pierda.
fuente: el comercio de ecuador
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